Durante los meses de mayo a julio, se desarrolló en Guatemala un proceso colectivo entre las dependencias de la municipalidad que trabajan con espacio público y vulnerabilidad, y las instituciones nacionales relacionadas a ambiente, planificación y gestión de riesgo. Este espacio supuso la ampliación del Grupo de trabajo de Soluciones basadas en la Naturaleza (SbN), con el cual se ha trabajado durante un año y medio, e involucró la participación del equipo municipal de: la Gerencia de Planificación, la dirección de Medio Ambiente, de Planificación Urbana, de Información Geográfica, de Desarrollo Social (DS), de la Mujer, de Control Territorial, de Obras, de Manejo de Desechos Sólidos y de Administración de Emergencias, así como la Empresa Municipal de Agua y las unidades de Urbanística y de Apoyo a Alcaldías Auxiliares. Además, participo el Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (MARN) y la Secretaría de Planificación y Programación (SEGEPLAN).
El trabajo se organizó a partir de talleres cortos, para facilitar la asistencia de los actores, y se basó en el uso de herramientas de la teoría del cambio. En total, el proceso involucro seis sesiones diseñadas con metodologías participativas, en las cuales se discutieron los problemas climáticos y plantearon los cambios que se desean alcanzar respecto a la vulnerabilidad y riesgo que ocurren en el municipio. Cada taller abordo distintos componentes de la planificación de la adaptación, los cuales incluyeron:
- la construcción de escenarios y una visión futura considerando las condiciones y tendencias actuales.
- la propuesta de objetivos y líneas estratégicas, y la identificación de barreras respecto a estas.
- la definición de los principios rectores del Plan y las acciones a desarrollar para cada eje de objetivos.
- la discusión sobre la infraestructura verde y azul que realiza la municipalidad para darle un enfoque climático.
- la definición de las SbN que se consideran más pertinentes respecto a los peligros en el municipio.
El proceso permitió generar espacios muy interesantes de discusión sobre las dificultades del municipio y las limitaciones y oportunidades de los instrumentos con las que cuenta la municipalidad. De este modo, los diálogos posibilitaron un entendimiento conjunto sobre los desafíos, como la necesidad de actualizar el Plan de Ordenamiento Territorial o de recuperar los recursos hídricos subterráneos. La complementariedad de conocimientos entre dependencias municipales e instituciones nacionales dio también lugar a importantes propuestas de acción, como el desarrollo de un fondo municipal que canalice recursos para desarrollar SbN en espacio público, o mecanismos que ayuden a integrar SbN en espacios privados. Las intervenciones y comentarios, por tanto, serán muy útiles como insumos para estructurar los esfuerzos de la municipalidad en la planificación adaptativa del municipio.
Las reflexiones y propuestas serán sistematizadas durante agosto, y servirán de base para definir el contenido de los componentes señalados del plan. Además, se complementará con las recomendaciones del análisis de políticas sobre las opciones para apalancar las SbN a nivel local y la guía sobre instrumentos de recuperación de plusvalías urbanas. Para septiembre se contempla tener un borrador del plan, que defina la estrategia de acciones basado en procesos y mecanismos que posibiliten nuevas medidas o mejoren las herramientas que ya existen. El plan entrará luego a un proceso de validación que definirá el instrumento final sobre cómo la capital del país plantea responder a la vulnerabilidad y riesgo climático en su territorio.