Xalapa se está convirtiendo en una ciudad verde, con muchas posibilidades para su población y en donde vivir es cada vez más agradable, dado que todos estamos involucrados en decidir nuestro futuro.
Hay muchas menos inundaciones y derrumbes, el agua y el aire están más limpios y el tráfico ha mejorado, pues ahora tratamos de andar más en bicicleta, caminar o utilizar transportes públicos. Los parques son espacios verdes para jugar y muchos animales pueden vivir, hay plantas y también frutas que se pueden comer.
Así la ciudad logra reconectar a la población con la naturaleza y ser menos vulnerable.